Sin duda alguna la pandemia de COVID-19 fue un parteaguas
hacia la educación tecnológica y nos dejó aprendizajes valiosos que podemos
aplicar para mejorar los ambientes
virtuales de aprendizaje.
Pudimos aprender que no basta con tener acceso a
plataformas; los docentes necesitan capacitación para aprovechar al máximo las herramientas digitales y así crear
experiencias de aprendizaje más ricas e interactivas.
La participación docente era muy limitada utilizando
herramientas simples como WhatsApp o zoom. Ahora conocemos distintas
herramientas como Moodle, Google
Classroom, Padlet o Canva que pueden diversificar las estrategias
didácticas.
Es importante buscar estrategias que nos ayuden a reducir
las brechas digitales, pues si de algo nos pudimos dar cuenta es que existen
zonas rurales o vulnerables que no tienen acceso a internet o a dispositivos
adecuados y esto afectó gravemente a esos estudiantes, se deben buscar
alternativas, como contenidos
descargables, programas de
préstamo de dispositivos o materiales
impresos para quienes no tengan acceso constante a internet.
Se debe brindar una enseñanza más personalizada pues desde
antes de la pandemia y durante ella nos damos cuenta que los alumnos aprenden a
ritmos distintos y en diversos contextos. Por ello, es necesario implementar estrategias
para que los estudiantes gestionen su tiempo y aprendan de forma más autónoma,
como lo exige la educación a distancia.
Es de suma importancia generar espacios de interacción
social, como chats, foros o sesiones informales para que los estudiantes se
sientan acompañados, pues cuando empezó la pandemia las clases se limitaban a las
redes sociales y aplicaciones de mensajería como WhatsApp, sin embargo, se trata de asemejar un poco la interacción
social con la virtual.
Es necesario conocer distintas plataformas digitales, porque
depender solo de una plataforma puede ser limitante. Las herramientas Web 2.0 nos
permiten crear contenidos interactivos y potenciar el aprendizaje.
Se ha vuelto de suma importancia la alfabetización digital
en todos los contextos posibles para mejorar los ambientes virtuales de
aprendizaje, también es esencial que docentes y estudiantes conozcan los
riesgos del entorno digital, así como buenas prácticas para proteger su privacidad y gestionar la
información de manera crítica.
El docente debe ser un guía y facilitador, promoviendo el pensamiento crítico, la
autonomía y el aprendizaje colaborativo, en lugar de ser solo un transmisor de conocimientos.
Es muy importante construir ambientes virtuales más inclusivos, flexibles y centrados en la
colaboración, lo que implica capacitar docentes, mejorar la
infraestructura digital y diseñar experiencias de aprendizaje que motiven a los
estudiantes a participar activamente en su propio proceso de aprendizaje.
REFERENCIAS:
Ortega, R. (2021). Uso de Herramientas Tecnológicas en
Tiempos de COVID-19. Revista Internacional Tecnológica-Educativa Docentes 2.0.,
1 (1), 31-39.
Se que los ambientes virtuales de aprendizaje están cada día mejor, las herramientas evaluacionan. Lo importante es aprender a usarlas.el COVID 19 nos trajo la inmersión a la web 2.0 y también otras más....
ResponderEliminarLes dejo un video para que vean que más trajo la pandemia https://vm.tiktok.com/ZMkoaX3N7/
Coincido totalmente contigo en el aprendizaje de la lección 3, todos recuerdan las maravillas de una educación en linea en ciudades, con docentes y alumnos tecnológicos, pero fue muy dificil establecer educación en las zonas vulnerables donde no se contó con los medios para comunicarse.Me gustan tus ideas para disminuir la brecha digital que se ha formado, yo agregaría, solicitar al gobierno que dote herramientas factibles para establecer una educación digital.
ResponderEliminar